La penetración de Smart TV en Francia supera el 60%, en Reino Unido roza el 40% y en USA se duplica esta cifra.
En España se venden más de 3 millones de televisores al año, y el 70% de ellos disponen de conexión a Internet. Se ha convertido en el dispositivo con mayor crecimiento y, según EGM, el 40% de los hogares ya posee al menos una Smart TV.
Estamos hablando de más de 7 millones de hogares que tienen la opción de disfrutar de contenido bajo demanda en la pantalla más grande de la casa.
Y el motivo de esto es sencillo. Según un estudio realizado por Toluna, la Smart TV es elegida por la gran mayoría de los usuarios como su dispositivo favorito para consumir series, películas y programas. Esto se debe al control que éste les ofrece: visualizar contenido bajo demanda con la capacidad de controlar la reproducción del mismo: “yo decido qué ver, cuándo y cómo verlo”.
Y se sitúa como el dispositivo preferido por los usuarios para consumir vídeo gracias a sus prestaciones técnicas y la gran comodidad que ofrece en su uso. La calidad de la imagen y el sonido lo convierten en el dispositivo predilecto para ver contenido audiovisual.
Por tanto, la televisión sigue siendo el medio por excelencia para consumir contenido premium y prueba de ello es que, según Kantar Media, más del 70% de la población contacta con ella en algún momento del día para consumir contenido lineal.
Y si hacemos referencia a aquellos consumos “no lineales” dentro del televisor, como pueden ser las aplicaciones de Smart TV, son casi 4 millones de hogares los que acceden a cualquier contenido en la pantalla grande, un 20% de los hogares de España al día, y casi un 50% al mes.
Los consumos están cambiando por la aparición de las OTTs y el auge del VOD. En España no tenemos cordcutting pero los espectadores se decantan por las nuevas formas de acceder a contenidos que les ofrece la tecnología y la hiperdistribución.
Y pantalla grande es sinónimo de contenido largo y premium. Según estudio de Ooyala, el conocido AdServer de vídeo, la Smart TV es el dispositivo preferido para consumir vídeos de más de 20 minutos como pueden ser series o programas.
Y dentro de este contenido largo, según el estudio de Toluna, de forma espontánea, los participantes destacaron que la publicidad en la Smart TV se considera un componente más del contenido, siendo totalmente aceptada gracias a que es mucho menos intrusiva que en otros dispositivos.
Por eso, según varios estudios en Estados Unidos, el completion rate, o lo que es lo mismo, el porcentaje de visualización de los vídeos publicitarios, supera el 90% sin problema en las televisiones conectadas, un 30% más que en otros dispositivos como el smartphone o el PC. Podríamos decir que los impactos crecen en Smart TV en detrimento de aquellos spots reproducidos en entorno desktop.
Toluna además ha intentado conocer el impacto y el recuerdo de la publicidad en esta pantalla digital con más de 1.100 encuestas entre usuarios de Smart TV de su panel.
Los resultados nos demuestran que el 91% de los usuarios que poseen una Smart TV en su hogar la usan al menos una vez a la semana para disfrutar de contenido televisivo. Un dato que destaca frente al 54% que usan el PC para este cometido, el 38% de la Tablet o el 37% el Smartphone.
Es el dispositivo predominante en prime time vs. otros terminales como el smartphone, que se usa más en otros momentos del día para ver vídeo online.
En el 72% de los casos, este consumo se hace acompañado.
Podemos decir que es un dispositivo de consumo grupal vs. otros devices que claramente son de uso en solitario como la Tablet o el Smartphone.
Y en un mundo digital donde hablamos de impresiones y no de individuos, y donde la moneda de cambio es el CPM y no el GRP, este consumo grupal beneficia 100% a las marcas.
Si convertimos las impresiones en impactos, las podemos multiplicar por dos. Éste es el número de personas que de media consumen contenido frente a un televisor.
Y en el caso del CPM, la cuenta es a la inversa. Dividimos este precio entre dos personas y el coste se convierte en la mitad, llegando a ser uno de los CPVs más baratos del mercado y además con la mejor calidad. Todo buenas noticias.
Y decimos calidad porque, según este estudio, se trata del dispositivo que genera una actitud significativamente más receptiva ante las marcas.
La Smart TV se posiciona como el entorno digital más cualitativo para los anunciantes, ya que:
- El 62% de los usuarios consideran la publicidad en Smart TV más fácil de ver vs. otros entornos como Youtube o Facebook en cualquier dispositivo.
- La mitad de los encuestados recuerda las marcas que aparecen en aplicaciones de televisión en Smart TV. Esto significa 17 puntos más de recuerdo frente a los impactos recibidos en Youtube y 19 vs. los impactos en Facebook.
- La atención que genera la publicidad en Smart TV (42%) es un 10% mayor que la que se obtiene impactando en redes sociales como Youtube o Facebook.
- Además, el 40% de los encuestados afirma que aumenta su interés por las marcas y productos tras ser impactados en el entorno Smart TV.
La tecnología lleva las bondades de internet también a la tele. Se complementa, crece y se hace más fuerte, pero manteniendo la importancia del dónde y el entorno premium. Es y seguirá siendo el centro de entretenimiento que domina el salón. Un entorno seguro y probado único para los anunciantes.